Maestra ausencia

Aquí todos te lloramos. La ausencia es una maestra hiriente que a golpes nos enseña; a veces sólo así aprendemos Josué por muy antipedagógico que parezca. ¿Qué diría Freire de esto? 

Tu dirías algo.

Te sabíamos cerca de nosotros, miembro de esta comunidad de locos que busca la vida en un túnel oscuro encendiendo mechones de alegría y de nostalgia. Ahora te lloramos mientra las ausencia nos enseña. 

Vamos aprendiendo, Caliche Caroma ya comenzó a decirle a sus amigos que los quiere, y yo me apuro a abrir las puertas de la cocina a todo aquél que quiera cocinar conmigo. Tal vez son esos momentos sencillos – a veces los más profundos - los que nos dan de comer en los ojos. 

El cariño o el amor en sus varias envolturas es quien nos redescubre vivos, y así entre tanta muerte nos aferramos a vivir sosteniendonos por el hilo más delgado: el del instante intenso. Un hilo muy delgado pero el único que brilla. Eso vino a enseñar la ausencia.