Tres posibilidades y ninguna.

1. Pueden estar dos seres sobre ruinas.

Tapiadas están las ventanas.

Colgado está el cielo para llorar desde arriba hasta el agujero del odio.

Los buitres los persiguen buscando el amor descompuesto,

nadie se libra de la putrefacción.

La aversión no es una opción en la vida.

2. Podría existir una construcción sobre el derrumbe de un pueblo,

eso es casi siempre lo que hacen para- algún día- aclarar el aire.

Miran detenidamente sin profundizar el polvo,  y

alguna luz aparece sin profundizar el cambio.

¿Quién puede ser aquella mujer o aquel hombre que no se derrumba?

No creen en nada, nada establecido los ata, ningún pasado los detiene.

Por dentro el caos los calma, aceptando pocas reglas. Ningún orden los confunde.

Todas las vidas se reflejan en sus ojos, parece que son antiguas las miradas, como si todo lo supieran cuando lo intuyen aun que no todo lo hagan.

3. Pueden coexistir dos seres apacibles.

¿Quién los conoce?

La humanidad está hecha para transitar ¿Por qué detenerse?